Así es como me sentí en el recital De Diego Ojeda. El cantante contaba entre canción y canción anécdotas de su vida, o las circunstancias que motivaron a hacer determinado tema. Todo muy profesional, cercano y con humor, . La verdad es que todos nos sentimos integrados en ese ambiente, y nos sentimos partícipes de pequeño grupo que formamos los espectadores, como la continuación del grupo de sus amigos, escuchando sus bonitas canciones y poemas que recitaba de vez en cuando entre una y otra canción. Diego Ojeda da la impresión de ser buena gente, y eso se agradece. “,

Simplemente espectacular

Que gusto volver a la normalidad en Café Libertad 8 con Diego Ojeda